Durante el último año se ha producido una fuerte lucha dentro de la asamblea local de EUiA Badalona sobre el futuro de la organización.
10/10/2014. Rob McDonald, SR Badalona. Publicado originalmente en el número nº7 de La Brecha.
El ala izquierda se ha unido y ha desafiado el viejo liderazgo mantenido por las mismas personas desde los inicios de la organización y que ha seguido actuando como si nada hubiera cambiado durante todo este período. El sector que se ha organizado como alternativa ha agrupado a su alrededor a los mejores activistas que luchan dentro de EUiA.
La estrategia de dicho sector se basa en intentar convertir la asamblea local de Badalona EUiA en una verdadera organización de lucha para el próximo período, a través de una democracia interna abierta y de la aproximación al resto de los movimientos de izquierda y sociales fuera del EUiA para lanzar una lucha común por el futuro de la clase trabajadora.
Por desgracia, esta ala izquierda ha sufrido una derrota temporal. El viejo liderazgo ha conseguido mantenerse apoyándose en los afiliados de mayor edad y más inactivos que aún les mantienen su lealtad y utilizando maniobras burocráticas y poco democráticas. El documento político alternativo presentado por el ala izquierda en la reciente conferencia política fue derrotado por un estrecho margen. La ya renovada, aunque igualmente vieja dirección sigue aplicando los mismos métodos e imponiendo decisiones erróneas y en contra de las tendencias generales del movimiento, como optar por métodos cerrados para
la elección de candidatos haciendo caso omiso de las recomendaciones de las direcciones nacional y federal, las cuales apuestan porque esto se lleve a cabo cabo mediante primarias abiertas. De esta manera se pretende blindar su control burocrático de la organización y se cierra la puerta a una unidad de la izquierda más allá de EUiA, unidad que estaría en condiciones de disputar el poder local. La vieja dirección se siente cómoda en esta situación que le permitiría mantenerse en el mismo lugar que ha estado históricamente, con una pequeña cuota de poder en el ayuntamiento, pero sin capacidad de tener una influencia real en los acontecimientos.
Pero la izquierda de la organización ha despertado y ve la necesidad de hacer cambios serios para afrontar los retos políticos que se avecinan. Socialismo Revolucionario apuesta decididamente por formar parte de esta lucha para cambiar las políticas erróneas y convertir a las organizaciones de referencia de la clase trabajadora en verdaderas herramientas de lucha contra el capital. Estas no pueden continuar siendo irrelevantes en
sus actuaciones desde las instituciones y asumiendo la lógica del capitalismo. Este es un debate que afecta a toda la izquierda en este momento y solo si se resuelve correctamente podremos afrontar los retos políticos y organizativos que se nos presentan.